Dürr ha instalado una línea de pintura automática para el fabricante de vehículos Nordex, con sede en Montevideo, Uruguay. Esta es la primera línea de pintura automatizada del país.
Nordex, que produce vehículos en Uruguay desde 1962 para diferentes fabricantes de equipo original (OEM), ha instalado una nueva planta de pintura automática de Dürr con el fin de cumplir con todas las exigencias de calidad y precisión.
Para instalar la línea de pintura automática, que representa un hito para la industria local, Nordex Uruguay contrató a Dürr Brasil. Como esta es la primera línea de pintura automatizada del país, también fue apoyada por organismos gubernamentales y municipales.
El inicio de la producción está previsto para mayo de 2021. El equipo de Dürr gestionó el proyecto con éxito a pesar de todos los desafíos derivados de la pandemia Covid-19.
Debido a la pandemia de Covid-19, la instalación de la línea de pintura fue aún más desafiante. Sin embargo, Dürr siguió todos los protocolos de seguridad y prevención para cumplir con los requisitos de Nordex y ensambló esta importante línea a tiempo.
“Este proyecto fue un desafío, principalmente debido a la pandemia. Participaron todas las áreas de la compañía, trabajamos juntos para superar todos los obstáculos, no solo técnicos, sino también con los permisos para entrar al país, debido a todas las restricciones adicionales que impone la pandemia. El proceso ha sido enriquecedor y tenemos un equipo muy comprometido que trabaja con extrema calidad y eficiencia. Estamos muy felices de ser parte de este proyecto tan importante para Nordex”, comentó Guilherme Custódio, gerente de proyectos de Dürr.
El proceso de pintura
La línea de pintura automática de Dürr comienza después del pretratamiento
de las carrocerías, que las prepara a fondo, asegurando que el vehículo entre en la línea sin impurezas.
Después de esta fase inicial, la carrocería interior se pinta manualmente, de acuerdo con los requisitos del cliente, utilizando pistolas pulverizadoras EcoGun de Dürr.
El exterior es pintado automáticamente por cuatro robots de pintura EcoRP de Dürr, que pueden identificar cada carrocería y configurar los parámetros de recubrimiento en consecuencia.
El proceso de pintura, en el que se pueden aplicar diferentes recubrimientos, va seguido de un período de evaporación y la aplicación de la capa transparente para proteger el recubrimiento y abrillantar el color. Una vez más, el interior se pinta manualmente y el exterior se pinta con dos robots EcoRP de Dürr. En la sala de suministro de pintura, ocho grupos de tanques (seis capas de base, una capa transparente y un solvente) proveen automáticamente los materiales correspondientes tanto para aplicaciones manuales como automáticas.
Mientras los vehículos se transportan a la secadora, hay otro período de evaporación. La secadora tiene un tamaño de 36 metros y una temperatura de unos 180 grados. Finalmente, los vehículos pasan por un túnel de enfriamiento para bajar la temperatura.
Un intercambiador de calor controla la temperatura de procesamiento en cualquier momento y garantiza resultados óptimos.
Sostenibilidad a la vanguardia
Además del sistema de aplicación, Dürr provee un sistema de depuración húmedo, que consiste en un circuito de agua cerrado, instalado debajo de la cabina de aplicación, que captura la pintura sobrante. El agua contaminada pasa por un sistema de separación y filtración, donde la pintura se separa químicamente del agua para ser utilizada nuevamente en el proceso.